Por qué empezamos esto
En 2019, Cristina y Marc trabajaban en consultoría financiera tradicional. Veían el mismo patrón repetirse: clientes con preguntas simples perdidos en sistemas complicados que nadie les explicaba bien.
Un día, después de otra reunión frustrante donde un cliente pequeño pagó por servicios que apenas entendía, decidieron intentar algo diferente. La idea era clara: crear herramientas que la gente pudiera usar sin necesitar un máster en finanzas.
Los primeros seis meses fueron caóticos. Desarrollamos tres prototipos que nadie usó. Pero escuchamos cada comentario. Para finales de 2020, teníamos algo que realmente ayudaba. Y desde entonces, hemos seguido mejorándolo basándonos en lo que nos cuentan las personas que usan nuestras herramientas cada día.